Por Verónica Ilarraz y Sonia Ruiz Moreno.

Construir y promover una buena marca empleadora es imperativo en la actualidad si queremos ser vistos como “best place to work”, compañías atractivas para el talento. Pero la manera en la que comunicamos debe alejarse de discursos marketinianos si quieres tener credibilidad en nuestros potenciales candidatos. Por eso, las campañas de employer branding hoy deben adecuarse al tono y estilo de comunicación que nuestros potenciales candidatos consumen en su día a día. Sin contar que el mensaje solo tendrá credibilidad si viene de un par, un colaborador actual de la compañía. Acciones como campañas de referrals en las que los propios empleados recomiendan candidatos y campañas de talent brand en las que nuestros empleados se convierten en embajadores sociales de la empresa serán clave para convertir en un «wow» la primera fase del journey del empleado: la atracción.